19 Septiembre 2020

Volver a Salidas 2020

Salinas de Torrevieja

Alicante

Por Miguel

En esta ocasión, desde Alicante Miguel Palomino y Miguel Delgado de Torrevieja visitamos “la laguna rosa”un lago artificial de la explotación salinera de Torrevieja,accediendo a su parte nortedesde “Las Torretas”.
Después de aparcar y andar unos 800mt llegamos a la orilla de la misma laguna sobre las 9:30, donde podemos contemplar su agua rosa, aunque a esta hora y hasta que no se ponga el sol encima, el reflejo del cielo azul y la baja intensidad no acentúan el rosado que tienen sus aguas.
Las orillas se encuentran cubiertas de sal frágil laminada que se hunde y cruje como al pisar nieve, las piezas buenas se deben buscar en el interior del agua y totalmente sumergidas ya que las zonas expuestas rápido pierden la cristalización por la humedad de la noche y la erosión, tanto del aire como las lluvias, creando “sombreros” de placas de sal sin cristalización en su parte superior.
Las piezas son tremendamente frágiles, resulta difícil sacar algunas del agua, y más difícil su transporte sin perder parte del material así como su conservación ya que la humedad ambiental debilita la pieza con el paso del tiempo.
Poco más que añadir, todas la piezas son muy parecidas en cuanto a cristalización, todas tienen el color transparente con matices rosados y alguna también sale blanco ligeramente opaco, debido posiblemente a que se ha cristalizado sobre una costra de sal ya deshidratada con anterioridad.
También en las orillas y donde queda agua estancada debido a las bacterias, se pueden encontrar partes con la sal “teñida “de marrón o de verde debido a las mismas bacterias, pero resultan piezas pequeñas y sin cristalización careciendo de interés alguno y con insectos muertos en las cercanías, algún ave muerta, además de restos de comida y regurgitaciones de las gaviotas que también frecuentan este lugar, dejando sus desechos naturales y algún sedal de pescador que se llevan en la boca o en las patas.
Como curiosidad, el puente trasero de un coche con sus manguetas y parte de la suspensión en el agua, en un sitio que carece de entradas accesibles en vehículo, todo cubierto de sal, así como un par de sillas plásticas, no sabemos si llevadas por los viandantes o arrastradas por el Dana que lleno de agua dulce la laguna hace un año, hecho del cual se está recuperando ya.
Un lugar muy bonito, con alto valor paisajístico, económico y natural, donde este año por primera vez y debido a la falta de intrusiónhumana que provocó el Covid19, anidaron y criaron los flamencos, además viven Alacranes, culebras de escalera, bastardas y antiguamentealguna víbora que da nombre a la zona por la cual hemos accedido a la laguna “La punta de la víbora”